Puede alterar tu vida personal y destruir tu autoestima, y todo desde la mente, no desde la boca. 

La halitosis o mal aliento es un tema tabú que provoca una situación paradójica: por un lado, existen personas que tienen mal aliento que no son conscientes de su problema, y por otro, hay quienes viven obsesionados con una “halitosis imaginaria”. Esta situación se acrecienta debido a la dificultad de valorar por nosotros mismos y de forma objetiva nuestro propio aliento.

Los dentistas distinguimos tres tipos principales de halitosis:

  1. Genuina o verdadera: el mal olor es real, se puede medir y objetivar.
  1. Pseudohalitosis: el paciente percibe y está convencido de que tiene mal olor bucal, pero las pruebas diagnósticas y la percepción de otras personas demuestran que no es así.
  1. Halitofobia: tras el tratamiento de la halitosis verdadera o de la pseudohalitosis, el paciente sigue creyendo de manera persistente que tiene mal aliento.