La capsula Informativa: ¿Cómo motivar a la Iglesia a evangelizar?

¿Cómo motivar a la Iglesia a evangelizar? no es una pregunta solo para pastores y líderes. Es una pregunta para todos los que hemos entendido y procesado el gran amor de Dios por la humanidad. Y por ende, hemos abrazado la gran comisión.

Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;  enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.

Mateo 28:19-20 RVR 1960

4 pasos para motivar a la iglesia a evangelizar

Resalta la Gran Comisión

Al leer los versículos en el evangelio de Mateo 28:19-20 sobre la Gran Comisión, es claro que Jesús quiso hacer un énfasis en la necesidad de compartir el mensaje del evangelio en todas partes del mundo. El propósito es que las personas puedan tener una relación personal con Él. La palabra «id» es el imperativo plural de ir. En otras palabras, compartir el evangelio no es una sugerencia es mas bien un mandato.

Enfatiza las Buenas Nuevas

En ocasiones, al evangelizar, las personas se enfocan en expresar las consecuencias del pecado, muerte eterna. Y si bien es cierto que la Biblia establece que «por cuanto todos pecaron están destituidos de la gloria de Dios» (Romanos 3:23 RVR), también es cierto que «de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.» (Juan 3:16 RVR).

Al evangelizar enfocándonos en este inmenso regalo, abrirá las puertas de los corazones. En Jesús hay perdón, salvación y vida abundante, esas son las buenas nuevas que nos da la Palabra de Dios desde el Genesis hasta el Apocalipsis.

El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel.

Isaías 61:1 RVR 1960

Comparte historias personales

De todas las estrategias evangelísticas, una de las mas antiguas y efectivas es la de compartir nuestra experiencia personal con Jesús. Un ejemplo claro de la efectividad de compartir nuestro testimonio personal al evangelizar lo vemos en las Escrituras, con la mujer samaritana.

Y muchos de los samaritanos de aquella ciudad creyeron en él por la palabra de la mujer, que daba testimonio diciendo: Me dijo todo lo que he hecho.  Entonces vinieron los samaritanos a él y le rogaron que se quedase con ellos; y se quedó allí dos días.  Y creyeron muchos más por la palabra de él,  y decían a la mujer: Ya no creemos solamente por tu dicho, porque nosotros mismos hemos oído, y sabemos que verdaderamente este es el Salvador del mundo, el Cristo.

Juan 4:39-42 RVR 1960

Su encuentro con Jesús en el pozo le trajo libertad; ella compartió lo que Jesús había hecho al revelarle las pérdidas en su vida y, sin juzgarla, ofrecerle agua viva. Un agua que no le daría sed jamás. Ella aceptó. Luego, sin mucha ceremonia, aun sin conocer las escrituras de los profetas, corrió a compartir con los suyos su transformación. El resultado fue una gran cosecha de almas en Samaria.

Por último, si quieres saber para motivar a la iglesia a evangelizar, empieza con tu ejemplo.

Da el ejemplo

Existe un conocido refrán en inglés: «Show, don’t tell» que significa que debemos mostrar nuestras acciones porque estas hablan más fuerte que nuestras palabras. Si deseamos encender el fuego del evangelismo en nuestras iglesias, casas, lugares de trabajo, no esperemos que otros lo hagan. Empecemos nosotros, y demos el ejemplo. Empieza hoy. Empieza tú.



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