La capsula Informativa: Mi corazón se alegra en el Señor

En el libro de 1 Samuel vemos que Ana fue una mujer estéril que derramó su corazón para pedir a Dios un hijo; el no poder ser madre le causaba sufrimiento. Jehová respondió a su anhelo y Ana hizo la promesa de entregárselo a Su servicio.

Cuando fue destetado el niño, lo entregó al sacerdote Eli, tal como se comprometió con Dios. Ana oró y empezó diciendo que su corazón se regocijaba en Él. 

Y Ana oró y dijo: Mi corazón se regocija en Jehová, Mi poder se exalta en Jehová; Mi boca se ensanchó sobre mis enemigos, Por cuanto me alegré en tu salvación.

1 Samuel 2:1 (RVR 1960)

¿Estaba feliz por dejar al hijo que tanto deseo y por el cual oró? Ella no podía contentarse en ese hecho, pero sí pudo gozarse en Jehová. El sacrificio que hizo fue grande; sin embargo, su compromiso y amor por Dios era mayor.

Alégrate en el Señor y no en las circunstancias

Como Ana, aparentemente podemos no tener razón suficiente para alegrarnos por estar pasando por diferentes circunstancias que traen dolor o desasosiego en nuestro corazón. Sin embargo, podemos regocijarnos en el Señor porque en Él lo tenemos todo.

Ana fue bendecida y su confianza fue recompensada con 5 hijos más. Además, el hijo que entregó a Dios fue el último profeta de Israel y fue quien sucedió al profeta Elí.

Cuando creas que no tienes razón para estar alegre recuerda que el verdadero gozo está en regocijarse en el Señor.

Oración del día

Señor, a pesar de lo que estoy pasando quiero regocijarme en ti, porque tú eres mi Fortaleza, me has devuelto la vida y no me desampararás pese a las adversidades. Gracias por tu amor incondicional, por ser mi Refugio y mi Fortaleza en todo tiempo. Hoy me alegraré en ti, en el nombre de Jesús, amén. 

Aplicación

¿Cómo te regocijarás en el Señor en aquello que te está preocupando tanto? Agradecerle es una excelente opción, ¿lo harías?



Ver fuente