La percepción que se tiene de uno mismo, incluyendo todos los aspectos de la vida, desde lo interno hasta lo externo, es lo que se conoce como autoestima. Es la valoración de uno mismo aunque no siempre se ajusta a la realidad.

Lo que se desconoce es la edad en la que este grado de autoestima alcanza su punto máximo. La seguridad emocional y la confianza se ven normalmente reflejadas durante la infancia.

Sin embargo, expertos de la Universidad de Berna (Alemania) han realizado una investigación que determina cuál es la edad en la que mejor se valora una persona.

El análisis comprende 331 ensayos sobre autoestima de 164.868 personas desde los cuatro hasta los 94 años de edad.

Los expertos obtuvieron los siguientes resultados:

  •  Entre los cuatro y 11 años: Empieza a crecer la autoestima. Cuando comienza la adolescencia, la curva se estabiliza y se mantiene constante hasta los 15.
  • Durante los siguientes años de vida hasta los 30: La autoestima vuelve a crecer considerablemente hasta llegar a su momento más alto, es decir, a los 60 años.
  • A los 70 años: Esta percepción empieza a mermarse y lo hace por el resto de nuestra vida.

La investigación destaca que «entender cómo se desarrolla la autoestima a lo largo de la vida es importante porque se trata de algo que realmente importa en el día a día de las personas».