Serena Williams sucumbió el miércoles en la primera ronda del Abierto de Miami, aún sin encontrar su mejor nivel en su regreso al tenis tras su embarazo y tocarle una dura rival en Naomi Osaka, triunfante por 6-3, 6-2.

El duelo propio de una final se produjo debido a que las dos jugadoras no estaban preclasificadas.

Osaka inició la semana en el puesto número 22 del ranking, el más alto de su carrera. Williams aparece en el 491 tras alejarse del circuito por más de un año.