¡Ser mamá no es lo único que te define!

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Los tiempos han cambiado, y el rol de la madre ha sido redefinido para darle más espacio a la mujer en la sociedad

Ser madre es una meta en la vida de la gran mayoría de las mujeres, pero el paso del tiempo ha cambiado a la forma en la que sociedad percibe a la mujer: antes la maternidad era el eje de su vida, hoy en día no.

La psicóloga Isabel Rangel explica que eso significa que no amen a sus hijos o que desprecien el ser madres, pero la maternidad no es lo único que determina el papel de una mujer:

Ser madre es una elección: sí, cada vez más las madres tomamos una decisión consciente de serlo y nadie las obliga. Tener ese control sobre quienes son es muy poderoso, y les da un sentido de responsabilidad renovado, haciéndoles, además, apreciar lo mágico y lo maravilloso, pero también lo difícil que es traer una vida al mundo.
Hacen muchas cosas antes de ser madres: estudiar, viajar, trabajar, divertirse e infinidad de cosas que una mujer hace antes, durante y después de tener hijos, lo que les abre la mente a muchos otros mundos que quieren conservar una vez que tienen hijos.
Sus otros roles también importan: además de madre son hijas, hermanas, esposas, amigas, profesionales, etc. Cuidar de esos roles las hace mejor madre ya que los niños entienden desde pequeños que no son lo único que importa en sus vidas, además de otorgar un sentido de logro en otros ámbitos.
Una identidad sólida te hace mejor madre: tener hijos te hará cuestionar todo sobre ti misma, haciendo que dudes todo lo antes dabas por sentado, pero tener confianza en las otras esferas de tu vida ayudará a asimilar este nuevo a rol como parte de tu identidad.
Ser mujer va mucho más allá de ser madre: aunque aún hay personas que creen que una mujer que no es madre es una mujer incompleta, la verdad es que las mujeres tienen la libertad para definir lo que ser mujer significa para ellas. Esto hace que al tener hijos lo hagan por razones que van más allá del deber ser o pensar que eso las hará sentir completas.
Compartir las responsabilidades con tu pareja cambia todo: tradicionalmente, la madre era la única o la más importante figura para los hijos: criarlos, alimentarlos y preocuparse por su bienestar era una función casi exclusivamente maternal, pero los nuevos tiempos hacen que la crianza compartida haga que se redefina lo que es ser madre. Un padre también es un proveedor de ternura y cuidados, mientras que la madre también es una proveedora del sustento económico.